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Orientación Universidad
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DOCAT 3 Doctrina Social, Guías, Proyectos, Investigaciones de Sociología

El mundo ha sido creado para la gloria de Dios.

Tipo: Guías, Proyectos, Investigaciones

2020/2021

Subido el 18/04/2022

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anton_el 🇦🇷

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La unión
hace la
fuerza
la iglesia y
lo social
Preguntas
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La unión

hace la

fuerza

l a i g l e s i a y

l o s o c i a l

P r e g u n t a s

34 22 ¿Por qué tiene la Iglesia una doctrina social? El hombre es un ser profundamente → Social. Tanto en el cielo como en la tierra depende de la comunidad. Dios hace entrega a su pueblo, ya en el Antiguo Testa- mento, de un orden humano y de mandamientos para una vida buena y justa. La razón humana sabe distin- guir entre las circunstancias justas e injustas que se necesitan para construir el orden correcto de las co- sas. En Jesús comprobamos cómo la justicia necesita del amor para ser plena. Nuestra concepción actual de la solidaridad está inspirada en el amor cristiano al prójimo. 62ss. 2419–2420, 2422–2426 45, 438 23 ¿Cuáles son las tareas de la doctrina social? La doctrina social tiene dos tareas:

  1. El compromiso de garantizar una actuación social y justa tal y como aparece en el Evangelio.
    1. La denuncia en nombre de la justicia de aquellas estructuras sociales, eco- nómicas o políticas que contradigan el mensaje del Evangelio. social Del latín, socialis (= sociable), lo perteneciente a la convivencia humana (reglada) en el Estado y en la sociedad; relativo o perteneciente a una compañía humana. Haz todo el bien que sepas: con todos los medios, de todas las maneras, en cualquier parte, a todas horas y a quien sea en tanto que puedas. JOHN WE SLE Y (1703-1791), autor de la conocida como «Regla de oro de John Wesley» l a unión hace l a fuerza Todos los cris- tianos, también los pastores, están llamados a preocuparse por la construcción de un mundo mejor. […] El pensamiento social de la Iglesia es ante todo positivo y propositi- vo, orienta una acción transformadora, y en ese sentido no deja de ser un signo de esperanza que brota del corazón amante de Jesucristo. PAPA FR ANCISCO, EG 183

36 25 ¿Cómo surgió la doctrina social? No se puede escuchar el Evangelio sin sentirse apelado socialmente. Las palabras «doctrina social», sin embar- go, se refieren en concreto a aquellas manifestaciones de índole social sobre las que el Magisterio de la Iglesia se ha venido pronunciando desde la encíclica Rerum No- varum del papa León XIII. La industrialización del siglo XIX trajo consigo una nueva «cuestión social». La mayoría de la gente dejó de trabajar en el campo para dedicar- se a la industria. Se desarrolló entonces un entorno sin protección laboral, sin seguros médicos, sin derechos de descanso vacacional, donde floreció también el trabajo infantil. Para luchar por los intereses de los trabajadores nacieron los sindicatos. El papa León XIII fue consciente de que tenía que reaccionar de alguna manera extraor- dinaria, así que en su encíclica Rerum Novarum recogió las líneas maestras de un orden social justo. Desde en- tonces, los papas han ido reaccionando a «los signos de los tiempos» y han ido revisando las cuestiones sociales más urgentes en la tradición de la Rerum Novarum. En este sentido, todas las manifestaciones recopiladas a lo largo de la historia se conocen como doctrina social. A los posicionamientos universales de la Iglesia, es decir, a los textos doctrinales de los papas, de los concilios y de la Curia Romana, se suman otros muchos posiciona- mientos regionales, como pueden ser por ejemplo los pronunciamientos hechos por una Conferencia Episco- pal concreta sobre asuntos de la doctrina social de la Iglesia acerca de temas sociales puntuales. 87, 88, 104 4395 (^26) ¿Por qué no le interesa a la Iglesia solo el individuo? Antiguamente se reprochó a la Iglesia su interés por salvar únicamente las almas de los individuos. Es ver- dad que ante Dios cuenta cada una de las personas. Todos nosotros somos únicos e irrepetibles. Pero a pe- sar de ello, desde el vientre materno estamos llama- dos a la comunidad con los demás. Solo podremos ser Ya no se puede decir que la reli- gión debe recluirse en el ámbito privado y que está solo para preparar las almas para el cielo. PAPA FR ANCISCO, EG 182 El Señor dijo a Caín: «¿Dónde está Abel, tu hermano?». Respondió Caín: «No sé; ¿soy yo el guardián de mi hermano?». GÉN 4, l a unión hace l a fuerza

die kirche und da s soziale 37 felices mediante una buena relación con los otros. Por ello, ya en el relato de la creación se dice: «El Señor Dios se dijo: ‘No es bueno que el hombre esté solo; voy a hacerle a alguien como él, que le ayude’» (Gén 2,18). Dios está interesado en el bien global de todos, por lo que su objetivo es desarrollar aquello de lo que todos somos partícipes en la diversidad: la comunidad. 61 210, 321 27 ¿Por qué la Iglesia practica la solidaridad? Una Iglesia que no fuera solidaria sería una contradic- ción en sí misma. La Iglesia es el lugar en el que acon- tece la solidaridad legada por Dios al ser humano. En la comunidad eclesial, el amor de Dios ha de encontrar la prolongación en el amor humano y, finalmente, llegar a todos. La Iglesia es el lugar en que Dios quiere reunir a todos, «la morada de Dios entre los hombres» (Ap 21,3). La Iglesia es «signo e instrumento» (LG) para la unión de todos los seres humanos con Dios y entre ellos. Con una Iglesia que, según el modelo de su Señor, es solidaria con los desfallecidos, las víctimas y los pobres de su tiempo, Dios intenta llegar a las gentes de todos los pueblos y culturas para asistirlas. Ahí donde las personas quieran revestir al mundo de humanidad, Dios estará a su lado. La Iglesia es por tanto solidaria con todos los que quie- ren hacer visible en la tierra la salvación de Dios. 60 122 El mayor don que puede tener un hombre bajo el cielo es poder vivir bien con aquellos con los que convive. BE ATO EGIDIO DE A SÍS (aprox. 1262), compañero de san Francisco ¿Puede una madre olvidar al niño que amamanta, no tener compasión del hijo de sus entrañas? Pues, aunque ella se olvidara, yo no te olvidaré. IS 49, La misericordia y la fidelidad se encuentran, la justicia y la paz se besan; la fide- lidad brota de la tierra, y la justicia mira desde el cielo. SAL 85,11-

39 1967 Beato Pablo VI, encíclica Populorum Progressio (PP) Reflexiones acerca de un esfuerzo global de todos para el desarrollo común de los pueblos y de la paz mundial. 1971 Beato Pablo VI, escrito apostólico Octogesima Adveniens (OA) Con motivo del octogésimo aniversario de Rerum Novarum, trata una serie de problemas específicos tales como el paro, la cuestión medioambiental y el crecimiento de la población. 1981 San Juan Pablo II, encíclica Laborem Exercens (LE) El trabajo humano no solo sirve para la manutención, sino que tiene una dignidad mayor. Forma parte de la dignidad de la persona y de su vocación cristiana. 1987 San Juan Pablo II, encíclica Sollicitudo Rei Socialis (SRS) Veinte años después de Populorum Progressio, aquí se trata de nuevo el tema del Tercer Mundo: el desarrollo no ha de ser solo económico, sino que debe tener un alcance mayor, también en las costumbres. 1991 San Juan Pablo II, encíclica Centesimus Annus (CA) Con motivo del centenario de Rerum Novarum y tras el derrumbe del comunismo, la encíclica pone en valor la democracia y la libre economía de mercado; el mercado debe permanecer no obstante dentro de un marco solidario. 2009 Benedicto XVI, encíclica Caritas in Veritate (CiV) Recuerdo de Populorum Progressio con extensas reflexiones sobre algunas facetas de la globalización. 2015 Francisco, encíclica Laudato sì (LS) La segunda encíclica del papa Fran- cisco trata de la salvación del medio ambiente en el horizonte más amplio del derecho de todos los hombres a la vida y a un desarrollo integral digno del ser humano. 2 – l a iglesia y lo social

40 28 ¿Qué relación existe entre la doctrina social y la fe? No todo el que se involucra política o socialmente es cristiano, pero difícilmente se puede llamar cris- tiano a aquel que no se involucre socialmente. El Evangelio llama intensamente al ser humano a que practique el amor, la justicia, la libertad y la paz. Con el anuncio del Reino de Dios hecho por Jesús no solo fueron salvadas y redimidas algunas personas pun- tuales, sino que se inició más bien una forma nueva de comunidad: un reino de paz y justicia. Este reino solo lo puede crear Dios. Los cristianos, sin embar- go, deben trabajar por una sociedad mejor. Se trata de «construir una ciudad del hombre más humana porque es más conforme al Reino de Dios» (CDSI 63). Mediante la comparación del Reino de Dios con la levadura y su amasado en tres medidas de harina hasta que todo fermenta (Mt 13,33), Jesús nos está indicando el camino que los cristianos hemos de se- guir en la sociedad. 63 123 29 ¿Puede lo social ser el fin último de la Iglesia? No. La Iglesia no habría cumplido aún con todos sus cometidos dentro de una sociedad únicamente justa. La salvación anunciada por la Iglesia se inicia en la tierra: redime al hombre, transforma las relaciones humanas y santifica las heridas de la comunidad. La redención se inicia en la tierra como signo de esperan- za dentro de estructuras sociales justas. No obstante, la «ciudad nueva» no es el resultado de las luchas y los esfuerzos humanos. Si hacemos cuanto está en nuestras manos, «la ciudad santa, la nueva Jerusalén» (Ap 21,2) desciende del cielo hacia nosotros. El reinado de la paz verdadera es un don de Dios. 64, 65, 67 769 Amad a los pobres y no les deis la espalda, pues si les dais la espalda, se la dais a Cristo. Él mismo se convirtió en hambriento, desnudo, apátrida, para que tú y yo tengamos la oportunidad de amarlo. SANTA TERESA DE C ALCUTA El que crea ser cristiano por ir a la iglesia se equivoca. Uno no se convierte en coche solo por estar en un garaje. ALBERT SCHWEIT ZER La aceptación del primer anuncio, que invita a dejarse amar por Dios y a amarlo con el amor que Él mismo nos comunica, provoca en la vida de la persona y en sus acciones una primera y fundamental reacción: desear, buscar y cuidar el bien de los demás. PAPA FR ANCISCO, EG 178 l a unión hace l a fuerza

42 Para que el Evangelio llegue a influir de verdad sobre nosotros es necesario tener en cuenta las circunstancias concretas en que vivimos. No podemos vivir como cristianos sin responder con verdad y honesti- dad a las circunstancias reales de nuestra vida. Los cristianos somos ple- namente miembros de la sociedad en que vivimos y llevamos dentro la sen- sibilidad del momento presente. CONFERENCIA EPISCOPAL E SPAÑOL A , Instrucción pastoral Católicos en la vida pública , 9 Es igualmente necesario afrontar juntos la cues- tión migratoria. No se puede tolerar que el mar Mediterrá- neo se convierta en un gran cementerio. En las barcazas que llegan cotidianamente a las costas europeas hay hom- bres y mujeres que necesitan acogida y ayuda. PAPA FR ANCISCO, 25 de noviembre de 2014, discurso al Parlamento Europeo 2 – gemeinsam sind wir stark Los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren, son a la vez gozos y esperanzas, tristezas y angustias de los discípulos de Cristo. Concilio Vaticano II, GS 1 (^31) ¿Cuánto ha de involucrarse la Iglesia en las cuestiones sociales? La Iglesia no tiene la tarea de sustituir al Esta- do ni a la política. Por este motivo, no propone soluciones para cuestiones técnicas de los pro- blemas sociales. La Iglesia no hace política, sino que desde el Evangelio inspira a la política. Los papas han desarrollado en sus encíclicas socia- les ideas centrales de índole social relacionadas

43 con la remuneración, la propiedad o los sindicatos; todas ellas han de contribuir al crecimiento de una sociedad justa. Hay tan solo un vínculo con la política en el caso concreto de los seglares cristianos que se dedican a ella. Muchos cristianos contribuyen con sus obras y pensamientos cristianos a asociaciones, gru- pos y colectivos que se ocupan en nuestros días de temas sociales concretos, como por ejemplo la ayuda a los refugiados o la protección laboral. 68 440 32 ¿Promueve la Iglesia un modelo social y político concreto? Sí, la Iglesia aboga por un orden libre y democrá- tico, ya que este es el mejor garante de los dere- chos humanos y de la participación social de todos. El papa san Juan Pablo II escribe al respecto: «La Cuando se llevaron a los comunistas me callé, pues yo no era comunista. Cuando se llevaron a los socialdemó- cratas me callé, pues yo no era socialdemócrata. Cuando se llevaron a los sindicalistas me callé, pues yo no era sindicalis- ta. Y cuando me llevaron a mí, pues ya no había na- die que pudiera protestar. M ARTIN NIEMÖLLER (1892-1984), teólogo protes- tante alemán y miembro de la resistencia contra el nacionalsocialismo die kirche und da s soziale

45 logo con las ciencias políticas, económicas, natura- les, técnicas y sociales. De este modo, la doctrina social consigue comprender, analizar e interpretar mejor al hombre y a las relaciones de la convivencia humana. 76, 77, 78 35 ¿Está destinada en exclusiva la doctrina social de la Iglesia a los cristianos? La doctrina social de la Iglesia no recoge nada que no pueda ser comprendido por la razón. Los papas in- sistieron desde siempre en que la doctrina social de la Iglesia tiene una importancia especial para la pro- pia comunidad eclesial. Puesto que la doctrina social adoptó sus impulsos esenciales a partir de la fe en un Dios que ama y es justo, cada gesto de amor y de jus- ticia se encuentra bajo la luz y la promesa de Dios. Este hecho es lo que más compromete a los cristianos a hacer el bien. No obstante, han de sentirse apela- dos por la doctrina social todos los hombres de buena voluntad. 75, 83, 84 328 (^36) ¿Se concluirá algún día la doctrina social? La convivencia social estuvo y sigue estando sometida a un desarrollo constante y a un notable movimiento en todos los niveles. Por ello, la doctrina social no se puede dar por finalizada o ser tenida por una doctrina encerrada en sí misma. Si bien se fundamenta en la base del Evangelio y en sus principios y concepciones firmes, desde aquí ha de seguir buscando constante- mente nuevas respuestas a los retos y asuntos socia- les del presente. 85, 86 Para los creyentes, el mundo no es fruto de la casualidad ni de la necesidad, sino de un proyecto de Dios. De ahí nace el deber de los creyentes de aunar sus esfuerzos con todos los hombres y mujeres de buena voluntad de otras religiones, o no creyentes, para que nuestro mundo responda efectivamente al proyec- to divino: vivir como una familia, bajo la mirada del Creador. PAPA BENEDIC TO X VI, CiV 57 Amar es querer el bien para alguien. […] Pues bien, queremos para todos los prójimos un bien igual, es decir, la vida eterna. Por lo tanto, debemos quererles a todos por igual. SANTO TOM Á S DE AQUINO, Summa Theologiae , Parte II-II, q. 26, art. 6, La mayor parte de los habitantes del planeta se declaran creyentes, y esto debería provocar a las religiones a entrar en un diálogo entre ellas orientado al cuidado de la naturale- za, a la defensa de los pobres, a la construcción de redes de respeto y de fraternidad. PAPA FR ANCISCO, LS 201 2 – l a iglesia y lo social

46 La web es más un invento social que tecnológico. TIM BERNER S-LEE (*1955), inventor del HTML y fundador de internet Toda vida verda- dera es encuentro. M ARTIN BUBER (1878-1965), filósofo de la religión austriaco-israelí Nos hace hu- manos el poder hablar entre nosotros. K ARL JA SPER S (1883-1969), filósofo alemán 37 ¿Para qué existen los medios de comunicación? Cuando no es posible la comunicación directa nece- sitamos de los medios de comunicación como media- dores indirectos de la información y como plataformas de intercambio y de discusión. Los medios de comu- nicación sirven para formar, informar y entretener, si bien este último aspecto prevalece a veces sobre los demás. Sin medios de comunicación no podríamos or- ganizar ni nuestra propia vida privada ni la compleji- dad de nuestras sociedades modernas. Los medios de comunicación son algo así como una masa de comu- nicación que une a las sociedades: cuanto más grande y compleja es una sociedad, más necesitamos de los medios de comunicación. Ante todo, las democracias no pueden funcionar sin un libre intercambio de opi- nión e información, y sin una involucración de todos. 414, 415 2993, 2994 38 ¿Cómo ve la Iglesia los medios de comunicación? Los medios de comunicación son elementos esenciales de las sociedades modernas. Su finalidad no está en ellos mismos, sino que en tanto que herramientas de la

nuevos medios de comunicación

excurso

48 sociales deben contribuir al bien común y al desarrollo de las personas. El papa Benedicto demanda «una seria reflexión sobre el sentido de la comunicación en la era digital». La comunicación eminentemente dialógica en las redes sociales supone para la Iglesia una gran oportuni- dad para su desarrollo en comunión (como comunidad). El papa Francisco tiene una cuenta de Twitter (@pontifex), que fue abierta ya por Benedicto XVI. A comienzos de 2016 contaba con veintiséis millones de seguidores. 415 2494, 2496 40 ¿En qué radica la brecha digital? La participación de todos en la configuración de la cosa común es el fin de cualquier medio de comuni- cación social. Pero de internet y de las redes socia- les quedan excluidas de antemano todas aquellas personas que por motivos estructurales, financieros o personales no tienen acceso a internet o no lo sa- ben usar de manera competente. Por ello, la Iglesia intenta evitar la exclusión de individuos o de grupos ( brecha digital ) contribuyendo una y otra vez al acceso libre a todos los medios de comunicación social, así como prohibiendo la aparición de monopolios o de controles ideológicos. En el caso de la exclusión de la gente mayor, de parados o de personas de escasa for- mación, es correcto hablar de una brecha social que hay que superar necesariamente. Pero no se trata aquí del proceso de comunicación en sí, sino más bien de la superación de todas aquellas estructuras injustas que excluyan de la información a personas o grupos determinados, y por lo tanto también de la formación y del desarrollo. 414, 416, 557, 561 2495, 2498, 2499 No se puede aceptar que el ejercicio de la libertad de comunicación depen- da de la fortuna, de la educación o del poder político. El derecho a la comunicación pertenece a todos. PAPA SAN JUAN PABLO II, instrucción pastoral Aetatis Novae sobre las comunicaciones sociales (1992)

Las redes sociales, además de instrumento de

evangelización, pueden ser un factor de desarrollo

humano.

PAPA BENEDICTO XVI, mensaje para la XLVII Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, 2013 Una mañana nos despertaremos y comprobaremos que ya no sabemos escribir a mano, que de nuestro escritorio desaparecie- ron los sobres y el papel y que la tinta de nuestras plumas se ha secado. Al abrir los labios no saldrá ningún sonido. Habremos olvidado estrecharnos las manos y reír a carcajadas. Seguramente sabremos comunicarnos, pero todos en un mismo estilo uniformado. Y la única diferencia entre nuestros mensajes será su contenido. CLIFFORD S TOLL (*1950), astrofísico estadounidense, pionero de la computación, en 1995

excurso 48 l a unión hace l a fuerza

49 41 ¿Cómo he de servirme correctamente de los medios de comunicación? La utilización con sentido de los medios de comunica- ción es un reto para cualquiera. Ya con los medios clá- sicos (periódicos, radio, televisión) hay que elegir con qué ocuparse. El consumo meramente pasivo produce con frecuencia un «usuario» que se siente triste y espi- ritualmente vacío. Aquí han de mostrar los padres, pro- fesores o encargados de menores un profundo sentido de responsabilidad: todos ellos deben transmitir con su ejemplo a los niños y adolescentes un uso soberano de los medios de comunicación y explicarles el enriqueci- miento que suponen. En el caso de los medios digitales hay que considerar además un nuevo grado de respon- sabilidad: sobre todo en las redes sociales uno deja de ser un consumidor pasivo , es decir, receptor de lo que otro produce, edita o envía, sino que todos podemos convertirnos rápidamente también en productores; podemos decir «me gusta», comentar o publicar en la red un post, una entrada, un vídeo o una foto. De esta manera, surge una responsabilidad equiparable a la de cualquier otro productor mediático. 376, 560, 563 2496 Los medios como cauces de expre- sión han de responder a las exigencias morales que reclama una sociedad políticamente libre y mo- ralmente sana, y lo hacen así cuando favorecen el intercambio de ideas y de informaciones entre todas las clases y sectores de la sociedad y cuando ofre- cen a todas las opiniones responsables la oportuni- dad de hacerse oír. Mensaje de la Comisión de medios de comunicación social de la Conferencia Episcopal Española Tenía mil amigos de Facebook, pero ningún amigo de verdad. Anónimo 2 – l a iglesia y lo social 49 nue vos medios

51 43 ¿Cómo es la comunicación ideal en internet? Si bien es deseable que los cristianos conquisten el «continente digital» y lo llenen de la luz del Evange- lio, también deben alejarse de un uso común de la comunicación. Tiene sentido que los cristianos suban y publiquen entradas relacionadas con temas cristia- nos. Pero si con sus palabras denuncian, calumnian, ofenden o enjuician a otras personas, o si bien pro- claman o contribuyen a la división, entonces estarán actuando en contra de cuanto pide el papa Francisco en Evangelii Gaudium : «La alegría del Evangelio es para todo el pueblo, no puede excluir a nadie»; esto afecta también a la presencia de los cristianos en los medios de comunicación social: «Que hoy la Iglesia salga a anunciar el Evangelio a todos, en todos los lugares, en todas las ocasiones, sin demoras, sin asco y sin miedo» (EG 23). 415 2468 455 44 ¿Hay medios de comunicación buenos y malos? Los medios de comunicación no son en sí ni buenos ni malos: algunos son más útiles y otros menos. Siem- pre depende de para qué y cómo se usen. Incluso los Hay que evitar lo que pueda ser causa u ocasión de daño espiritual, lo que pueda poner en peligro a otros por su mal ejemplo, o lo que dificulte las informaciones buenas y promueva las malas; esto sucede muchas veces cuando se colabora con empresarios que ma- nejan estos medios con móviles exclusivamente económicos. Concilio Vaticano II, Inter Mirifica 9 51 El derecho a ser informado ade- cuadamente se relaciona con la misma libertad de comunicación. La vida social se apoya de hecho en el intercambio y diálogo constantes de los individuos y de los grupos entre sí. Instrucción pastoral Communio et Progressio 44 2 – l a iglesia y lo social nue vos medios

5252 medios más útiles se pueden convertir en un entre- tenimiento sin sentido o en información inútil, y ade- más pueden separar a las personas de la vida real. Los dueños de los medios de comunicación pueden lucrar con ellos desencadenando intencionadamente conductas de adicción en los usuarios. Los medios de comunicación están sometidos a una comercialización cada vez más fuerte. Una y otra vez se convierten en los recursos baratos para el placer, que difunden la mentira en un mundo triste, sin esperanza. Con fre- cuencia se recurre a internet para buscar contenidos pornográficos o en los que se exalta la violencia. Los proveedores desarrollan para ello nuevas formas de exposición (como los juegos de ordenador), así como estrategias de venta para crear «usuarios» dependien- tes (en ocasiones, adictos). Todo esto es un mal uso de los medios. Los cristianos deben evitar consecuente- mente ciertos contenidos y ayudar, desde el amor y Las dinámicas de los medios del mundo digital […] no favorecen el desarrollo de una capacidad de vivir sabiamente, de pensar en profundidad, de amar con generosidad. […] La verda- dera sabiduría, producto de la reflexión, del diálogo y del encuentro generoso entre las personas, no se consigue con una mera acumulación de datos que termina saturando y obnubilando, en una especie de contaminación mental. PAPA FR ANCISCO, LS 47 Desinformación es decir la mitad de las cosas, las que son más convenientes para mí, y no decir la otra mitad. Y así, el que ve la TV o el que oye la radio, no puede for- marse un juicio perfecto, porque no tiene los elementos y no se los dan. De estos tres pecados, por favor, huid. Desinformación, calumnia y difamación. PAPA FR ANCISCO a los periodistas, 22 de marzo de 2014 Google no es un medio, es un modelo de negocio. FR ANK A. ME YER (*1944), publicista suizo

excurso l a unión hace l a fuerza