Ensayo del libro mima tu cerebro respecto a lo que pienso, Apuntes de Liderazgo y Gestión de Equipo

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INSTITUTO TECNOLÓGICO

DE PUEBLA

HABILIDADES DIRECTIVAS I

Ensayo: “Mima tu

cerebro”

7 DE SEPTIEMBRE DE 2022

No. Control:

Aluma: Estefanía

López Flores

INTRODUCCIÓN

El cerebro es el órgano responsable del control de todo el cuerpo, así como también de los sentidos, de la memoria, del pensamiento, controla los movimientos voluntarios, recibe la información, la interpreta y la manda a todos los órganos del cuerpo humano. Michel Cymes expone al cuerpo humano como un aeropuerto y al cerebro como la torre de control de este y dice que, si el cerebro no funciona bien, podemos estar seguros de que varios órganos y la mayoría de las funciones acabarán estrellándose, es decir, que necesitamos de él para que todo lo demás pueda funcionar. El presente ensayo tiene como objetivo dar a conocer lo importante que es nuestro cerebro y crear un poco de conciencia en todas aquellas personas que lo lean, ya que como todos sabemos lo hemos descuidado con nuestros malos hábitos a los que estamos acostumbrados.

DESARROLLO

El primer capítulo de este libro se nombra “Tu cerebro tiene un buen apetito”. Aquí el autor hace referencia de todos aquellos alimentos que aportan vitaminas, antioxidantes, minerales, y comparte todos los beneficios que cada uno de ellos aporta para que nuestro cerebro funcione de la mejor manera posible. Este órgano es el que más necesita de los alimentos ya que se apropia de una quinta parte de las calorías que ingerimos y del 40% del oxígeno que respiramos por lo que considero que debemos tener una buena alimentación y ser conscientes de todo lo que consumimos ya que esto podría afectar su funcionamiento. La encargada de alimentarlo es la sangre y es importante que las arterías estén en buen estado para que exista una buena circulación y llegue todo lo que el cerebro necesita. Tenemos que aprender a moderarnos con aquellos alimentos que no son buenos para la salud, esto no quiere decir que dejemos de consumirlos al 100% pero si disminuir las cantidades o sustituirlos por otros que nos afecten menos. Tenemos que ingerir alimentos que contengan omega-3 ya que estos ácidos grasos son esenciales para la constitución de la membrana que envuelve las neuronas y nuestro organismo no es capaz de producirlos, por lo que es importante que los obtengamos mediante la alimentación y estos podríamos encontrarlos en alimentos como el ajo, el aceite de oliva, en pescados grasos como el salmón, en la sardina que tiene propiedades relajantes y es rica en vitamina D y estos además de contener omega-3 son muy ricos en fósforo, otros alimentos son el aceite de linaza que a la vez es bueno para el sistema cardiovascular, los huevos, camarones, nuez, la chía, entre otros. Recalco que se debe seguir una alimentación razonable entre los omega-6 y los omega-3 ya que estos son como rivales, ambos ocupan la misma enzima para metabolizar, es decir, transformar una sustancia para que el organismo pueda asimilarla. Los alimentos que contienen omega-6 se pueden encontrar en el aceite de girasol, en el de maíz, y en la carne de los animales que son alimentados con cereales. Los aceites son buenos para la salud y para obtener mayores beneficios se deben combinar, los más esenciales son un aceite rico en omega-6 (girasol), un aceite rico en omega-3 (nuez) y un aceite rico en ácidos grasos monoinsaturados (oliva). Algo de lo que no tenía conocimiento y que me sorprendió es que el vino tinto consumido con moderación nos trae beneficios para la salud, este contiene resveratrol el cual activa una

A nuestro cerebro también le encanta la azucar que es indispensable para nuestra salud ya que nos proporciona energía tanto a los músculos como al cerebro, pero tampoco podemos abusar de ella y excedernos ya que el organismo los transforma en grasas perjudiciales antes de almacenarlos. Esta podemos encontrarla de muchas maneras, en las frutas, en las legumbres secas, en los cereales, etc. Los siguientes alimentos como los copos de avena, el arroz integral, los garbanzos, las habas, la pasta integral, entre muchos otros más, también contienen azucar, pero nos podemos beneficiar de muchas otras maneras con ellos, podemos reforzar nuestro sistema inmunitario o luchar contra la diabetes, las enfermedades cardiovasculares o el sobrepeso. La sal es algo que debemos evitar o al menos disminuir por que tengo claro de que esto es algo que consumimos con mayor frecuencia y en mayor cantidad y dudo que la dejemos del todo, pero reflexionemos un poco y analicemos que es la encargada de perjudicar a muchos de nuestros órganos. El cerebro requiere de mucha agua, es agua un 80%, tanto él como el cuerpo necesita mantenerse hidratado, por lo que debemos consumir agua constantemente siento esta natural, sin azucares ni saborizantes. “El agua es vida”. La falta de esta desencadena una gran lista de efectos que pueden perjudicarnos, como la fatiga, el nerviosismo, la ansiedad, la irritación, la somnolencia, todos estos a su vez causan otros problemas, por eso la importancia de tomarla. Hay muchos alimentos que contienen agua, pero no ocupan el lugar de esta, asi que consumirla no es una opción, si no una obligación. Considero que en la actualidad nuestra alimentación se basa en lo que a simple vista creemos que es saludable, pero nuestro cerebro nos manipula en muchas ocasiones, influye basante en nuestras decisiones, muchas veces nos vamos más por el aspecto que tienen los alimentos o nos dejamos influenciar por todos aquellos anuncios o publicidad que hacen ver las cosas extremadamente deliciosas pero que nos destruyen poco a poco. Es verdad que no somos conscientes de lo que consumimos y que descuidamos a nuestro cuerpo, a nuestro cerebro y a todos nuestros órganos en general al no darles lo que cada uno necesita para su buen funcionamiento, en mi opinión, considero que es importante investigar un poco acerca de todo lo que metemos a nuestra boca asi podremos saber al menos en que nos está beneficiando o en qué nos esta afectando y asumir las consecuencias de ello. Cada persona tiene distintas necesidades y cubrirlas al 100% muchas veces no es nada facil al igual que cambiar a una alimentación más sana ya que el cerebro se acostumbra a toda esa comida chatarra, pero eso no quiere decir que no se pueda lograr, claro que podemos intentar por cuidarnos un poco más hasta que esto se vuelva un hábito. El segundo capítulo tiene por título “ A tu cerebro le gustan las buenas costumbres”. En este capítulo Cymes expone todo el proceso que lleva el cerebro para adquirir nuevas costumbres asi como también el proceso para deshacernos de aquellas que no nos benefician positivamente. El cerebro se lleva de 21 a 30 días en convertir una actividad en un hábito, es un largo tiempo pero debemos tomarlo con calma y poco a poco irnos acostumbrando a ello hasta que ya no nos cueste hacerlo. Es importante que aprendamos a identificar cuales son las costumbres que nos benefician para tratarlas más a fondo y también debemos aprender a identificar las costumbres que no son buenas y que solo nos traerán problemas, esto nos ayudará a corregir a tiempo y podremos evitar que se convierta en un vicio, es decir, en malos hábitos.

Estamos acostumbrados a no llevar acabo nuestro ciclo del sueño completo y no nos damos cuenta de lo importante que es, no dormir las horas necesarias afecta al proceso de renovación neuronal en el hipocampo, una zona clave del cerebro, ya que interviene en el funcionamiento de la memoria y en el control del estado de ánimo. El sueño además de ayudarnos a recuperarnos físicamente, nos ayuda con nuestro estado mental, una buena noche de sueño reparador ofrece múltiples beneficios: mejor aprendizaje, mejor memorización, eliminación del estrés y de las toxinas, reparación de los tejidos, regeneración celular, más entusiasmo, más alegría, más buen humor y refuerza el sistema inmunitario. Este se compone de varios ciclos y a su vez estos de 4 fases: la fase 1 corresponde a la transición entre la vigilia y el sueño, la fase 2 es la del sueño confirmado, la 3 corresponde al sueño profundo y la 4 es la del sueño paradójico entre estas fases aproximadamente son 90 minutos los que pasan y el ciclo se vuelve a repetir. Una noche completa tiene aproximadamente entre 3 y 6 ciclos y el tiempo ideal que debemos dormir es de 7 horas y media, dormir menos de 6 horas interfiere con los mecanismos hormonales y aumenta las probabilidades de sufrir enfermedades como diabetes o hipertención, ahora ya sabemos del proceso que pasa mientras dormimos. Existen personas que toman medicamentos para dormir ya que sufren de insomnio pero estos pueden traer efectos secundarios que perjudican principalmente al cerebro y un consumo excesivo provoca el deterioro de la memoria y afecta a las capacidades cognitivas. Desde mi punto de vista creo que antes de llegar a este punto existen otros métodos que no nos perjudicarian y que podemos tomar en cuenta e intentarlos para poder conciliar el sueño. El estrés es una reacción fisiológica del organismo en respuesta a una estimulación externa, física, psíquica o sensorial que interpretamos como amenazante, sin embargo nos ayuda a adaptarnos rápidamente a diversas situaciones inquietantes y, con frecuencia, imprevistas. Creo que todos los seres humanos hemos pasado por esto ante diversas situaciones que se nos han presentado a lo largo de nuestra vida, pero es cierto que nos ayuda a volvernos más fuertes, más pensantes al analizar aquellos aspectos que nos causan esta reacción y a sobrellevar la situación. Existe tanto el estrés bueno, como el malo, este primero nos estimula a hacer ciertas cosas y nos da energía siendo un valioso motor para el organismo. Por el contrario, el malo afecta a nuestro cerebro, puede transformar su tamaño, su funcionamiento y su estructura y no para bien. Asi que busquemos la manera de reducir ese estrés, aprendamos a respirar, hagamos actividades deportivas, aprendamos a decir que no, mantengamos orden en los lugares en los que nos encontramos constantemente, salgamos, escuchemos música, esta promueve la plasticidad cerebral y también ayuda a evitar que el estrés aumente, hagamos cosas que nos ayuden a sentirnos mejor, cada persona se conoce así misma y sabe lo que necesita. Un término importante que vale la pena mencionar es la sofrología, una ciencia que estudia el enfoque personal, que permite a cada uno encontrar recursos en su propio interior: la conciencia humana, y un método que propone técnicas para vivir en armonía. Permite gestionar el dolor, pero también combatir numerosos problemas ansiosos, depresivos e incluso obsesivos. La psicología positiva se centra en la salud y en el bienestar, para promover el crecimiento y la realización personal, en los ámbitos individual, colectivo y social. En otras palabras, es la ciencia de la felicidad, aporta a nuestra salud física, mental, social y a nuestro entorno. ¿Qué necesitamos para ser felices? cosas compromiso es uno de los ingredientes de la felicidad

refuerzan las zonas de contacto y crean nuevos circuitos de transmisión), debatir (ayuda a mantener en forma los circuitos neuronales), hablar (en voz alta se activa la memoria auditiva), asociar, jugar (sudokus, naipes, scrabble, tarot, crucigramas, etc.), actuar (la memoria funciona mucho mejor cuando esta despejada), aprender, hacer trampas, son las 13 maneras que nos presenta cada una con sus características y sus observaciones a considerar para ponerlas en práctica. Aprender y desarrollar estrategias puede ayudar a mejorar la memoria, el método de los lugares es un ejemplo que el autor nos menciona y consiste en asociar el entorno en que nos encontramos al proceso de memorización respetando dos reglas de oro, la primera “apelar a nuestro espíritu infantil” y la segunda “utilizar los cinco sentidos”. Visualizar, registrar, imprimir, memorizar y volver al principio son los pasos a seguir para eficientar esta técnica. En 1943 el pediatra austriaco Hans Asperger da nombre al “Síndrome de Asperger”, el cual se caracteriza por la capacidad de almacenar en la memoria una cantidad extraordinaria de información. Los niños afectados por este síndrome son mayoritariamente varones y se expresan sobre todo en el ámbito del arte y de la ciencia. Aunque se puede considerar a estas memorias como geniales muchas veces están perturbadas. Todos tenemos, enterradas en nuestro interior, referencias que nos son propias y experiencias asociadas a emociones, podemos acudir a ellas para inventar métodos mnemotécnicos. Las asociaciones que se puedan establecer son propias y de nadie más. Realizar estas asociaciones recurriendo a nuestro mundo nos facilitara el trabajar con nuestra memoria. Entre los 15 y los 30 años de edad la memoria funciona a su pleno rendimiento, es el periodo de las primeras veces y de los descubrimientos, de los estudios, de la entrada en el mundo laboral, de la autonomía social, de los tramites administrativos, de la sexualidad. Es un periodo muy estimulante, posteriormente se entra a otro periodo de la vida en el que aprender y retener información exige un poco mas de tiempo y de concentración. A los 50 años, la memoria empieza a envejecer, y para los 75 años este proceso se acelera. Una memoria que envejece no es lo mismo que una memoria inoperante. Un equipo de investigadores suecos demostró que las neuronas de un cerebro estimulado se renuevan a un ritmo de 2% anual. En el caso del feto a partir de la duodécima semana de gestación es capaz de oír, oler, percibir sabores y sentir. La repetición del estimulo se le conoce como habituación. Un punto al que hace referencia el autor en este tema es que lo que es significativo para los padres no lo es para el niño, un niño al que le contamos nuestros recuerdos expresados con claridad y con palabras sencillas el recordara mejor los propios. Las mujeres son capaces de recordar con más detalle y precisión que los hombres, pues tienen mejor memoria episódica. Con esto podemos decir que los hombres y las mujeres ven el mundo de distinta manera. Cuando mas competente somos en un ámbito, mejor es nuestra memoria en él, si un tema no nos interesa este será más complejo, es mejor centrarse en lo que nos interesa y que responda a un deseo y emoción. Ya el autor nos refiere la relación que existe entre la memoria y los sentidos, la memoria y las experiencias. Cuando alguien se enfrenta a tensiones internas que le resultan insoportables, consciente o inconscientemente, puede reprimir los recuerdos para conservar su integridad psíquica y en ocasiones también la física. Sigmund Freud fue el primero que explico este mecanismo “la represión” que es una forma de amnesia psicógena. Una vez superado un

umbral de estrés o de dolor, variable en función de cada persona, la memoria puede elegir ocultar un acontecimiento traumático. Entonces la represión fue como un anticuerpo contra el dolor. En el último capítulo “Tu cerebro puede fallar” Michel Cymes nos alude a varias de las enfermedades que puede tener el cerebro, empezando por el alzheimer, que amenaza a los mayores de 65 años y afecta mayoritariamente a mujeres, esto por el tema de las hormonas. Algunos de los primeros síntomas que se manifiestan son: los problemas de memoria, dificultades de lenguaje, alteración del entendimiento, problemas de orientación espaciotemporal, el papeleo: un buen indicio (las formalidades administrativas requieren capacidades abstractas que las personas con alzheimer han empezado a perder), la persona cambia (los cambios de humor son un buen indicador de la aparición del alzheimer. Es importante considerar que subir escaleras a diario retrasa en siete meses el envejecimiento del cerebro. Aunque la genética es uno de los factores que intervienen, el entorno y la forma de vida también tienen bastante que ver. El bajo nivel educativo, el tabaquismo, la depresión, el sedentarismo, la diabetes, la hipertensión y la obesidad, son factores de riesgo relacionados con esta enfermedad. Aprender, instruirse y reflexionar son la mejor manera de evadir el alzheimer. Mas adelante el autor nos sumerge al tema del Ictus (accidente cerebrovascular o ACV), cada año unos 15 millones de personas lo sufren, una tercera parte de ellos muere y otra tercera parte sufre incapacidad permanente. Los síntomas mas comunes son: parálisis, entumecimiento facial, vértigos, dolor de cabeza, problemas de visión y afasia. La contaminación atmosférica se suma a la lista de principales factores de riesgo y como sabemos, los seres humanos somos los responsables de este gran problema. La plasticidad permite que los enfermos recuperen algunas de sus facultades debido a que las neuronas ilesas intervienen en tareas que antes no desempeñaban, el cerebro establece nuevas conexiones. La música brinda beneficios para reeducar a las personas con afasia. Algunas conductas para prevenir el ictus son: vigilar la alimentación, apagar el cigarrillo, reducir el consumo de alcohol, controlar la tensión, hacer deporte, pincharse (hacer un análisis de sangre cada año), informarse sobre los medicamentos, evitar el estrés, cultivar el optimismo, tener cuidado con los dolores de cabeza. El parkinson es otra enfermedad que afecta al cerebro, específicamente la base, cuya función consiste en fabricar y liberar dopamina, indispensable para controlar los movimientos del cuerpo, esta enfermedad se manifiesta con una lenta evolución degenerativa y algunos de sus síntomas son: lentitud, rigidez y temblores. Los tumores es otro tema abordado, donde menciona sus principales síntomas: el dolor de cabeza persistente y resistente a los medicamentos habituales, náuseas, vómitos, vértigos, pérdida de memoria y problemas motrices. La depresión es un trastorno del estado de ánimo, esta la hemos mencionado a lo largo del ensayo, es otro problema que afecta a nuestro cerebro, sus principales síntomas son: tristeza, perdida del interés y del placer por las cosas, desvalorización, ideaciones suicidas, ralentización psicomotriz, fatiga, perdida del apetito, problemas del sueño y dificultades de concentración y de atención. A lo largo de la vida se pasan por curvas mas complicadas: la adolescencia, la maternidad, la enfermedad, la jubilación, son algunas de ellas a las que hay