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ensayo legitimdad del poder poltico
Tipo: Apuntes
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Docente: Estudiante: ADRIANA UNIVERSIDAD MANUELA MATERIA XXX
El modelo estatal colombiano escogido por el constituyente de 1991 se fundamentó en un Estado Social de Derecho, que hace referencia entre los fines y medios expresados en la Constitución, que quienes integren en virtud de un proceso democrático, los órganos del Estado, deben orientar su labor, su actividad administrativa, hacia el cumplimiento de los fines esenciales definidos por la teología constitucional, lo que implica una relación inescindible entre la función administrativa y los postulados del Estado social de Derecho. Las ciencias políticas y el derecho, son dos ciencias que trabajan conceptos aparejados, desde diferentes ópticas. En primer lugar, para nadie es un secreto que la legitimidad política y su relación con el ejercicio del poder del estado, aparece como representación para la titularidad del poder político, y esta titularidad del poder es consecuencia de la voluntad electoral de un determinado estado, así mismo, entra en consonancia la definición de política con la legitimidad política y la necesidad de que existan unos hombres de mandar sobre otros hombres. El autor, Carlos Delgado, nos habla de 4 principios que permanecen llamados como inicios de legitimidad, los cuales son: el electivo, el democrático, el aristocrático - monárquico y finalmente, el hereditario. Según Ferrero, los inicios de legitimidad únicamente son ensayos de justificación del poder, explicaciones que buscan basar el derecho del gobernante a mandar y el deber de los gobernados a obedecer y gracias a esto, el ejercicio del poder en las democracias modernas se justifican sobre 2 inicios de legitimidad: el democrático y el electivo. El primero hace referencia el reconocimiento de la soberanía popular; y el segundo, se funda sobre las elecciones libres de los representantes del pueblo. Este creador identifica 3 tipos de dominación legítima: a) dominación de carácter racional, que tiene relación con la religión en la legalidad del orden estatuido y del derecho de mando de las autoridades por ventaja de la legalidad (dominación burocrática); b) dominación de carácter clásico, correspondiente a la religión de la santidad de las tradiciones y de los señalados por aquellas tradiciones para ejercer autoridad (dominación patriarcal), y c) dominación de carácter carismática, que tiene relación con la religión en la santidad, heroísmo o ejemplaridad de una persona para ejercer autoridad (dominación caudillista, profética o demagógica). De dichos
decir, son los medios mediante el cual, se eligen a presidentes o cualquier servidor público, mediante amplias manifestaciones concretas. La ilegitimidad material en el Estado, si habla concretamente Colombia no es ajeno a este sistema, la historia se repite una y otra vez, que durante el tiempo hemos visto casos, relacionados íntimamente con el fenómeno de parapolítica, un ejemplo claro, sería el cartel de toga, y otro determinístico, los falsos positivos, donde el estado era quien ejercía un poder corrupto y clientelismo, asociado a la favorabilidad que buscan los políticos de que el pobre sea cada día más pobre, y el rico más rico, donde la corrupción actúa de manera trascendental, donde alivia al pobre y lo mantiene entretenido con las posibles soluciones pero en realidad solo hace parte de su proceder, otro ejemplo de esto, es el carrusel de la contratación, lamentablemente Colombia paso de la legitimidad del poder a una ilegalidad, que cada día se evidencia más, evidenciándose por los ejercicios de patronazgo político, por transacciones con líderes comunitarios o bien por compra de votos, importante aclara que las personas que pretendan ir en contra de la corriente o la bien llamadas “MAQUINARIA”, se convierten en personas víctimas de asesinato o muchas veces judicializados, a causa de su pensamiento diferente. En la película se evidencia todo lo anterior, más concretamente cuando el programa de televisión se aprovecha de la pobreza de los padres de las niñas que en su momento estaban secuestradas, para obtener cierto beneficio publicitario, aquí podemos evidenciar como la corrupción va íntimamente ligada con la pobreza, el clientelismo, va ligado a todo lo que hacía el programa de televisión , para ayudar a la imágenes, de ciertas personas políticas, a cambio de favores y dinero, sin importar la vida de los demás, la corrupción se evidencia cuando en la película el gobernador entrega todos los dineros fiscales del estado a manos del programa de televisión, tan solo por una mejor amiga, para cumplir un fin en común, llegar a la presidencia de determinado país, sirviendo este programa como desviador, de la información que realmente importaba. En tercer lugar tenemos los efectos de la captura de estado en el estado social de derecho, la legitimidad del poder del Estado y de sus instituciones, bajo la premisa de la constitución de 1001, deja una importante aclaración, frente a los derechos irrenunciables, que cada persona tiene, y sobre todo el deber que tiene el estado de basar sus instituciones y basar el poder político, en ellos, basándose más concretamente en el respeto, la garantía y la promoción de los derechos fundamentales, partiendo de esto, podemos que la legitimidad del poder del estado,
debe ser acorde a lo que se ha estipulado, en la constitución, y si esta no se ejerce de manera social, de esta manera, entonces esta legitimidad, carecerá en el sentido material, es decir, como se materializa lo anteriormente expuesto, cuando el estado deja de orientar su quehacer administrativo hacia el cumplimiento de los fines del Estado, para orientarlo hacia la satisfacción de los intereses particulares y corruptos. Por eso el estado, está en la obligación de propender los valores y principios constitucionales, y más concretamente en nuestro estado colombiano, ceñirse a lo que diga la Corte Constitucional colombiana, toda vez que, de esa manera, se permite orientar la concreción y limitaciones del actuar del interés particular sin que afecte el interés público. La CDE, como lo citaba la lectura, produce un efecto directo en la legitimidad material en el ejercicio del poder en el Estado Social de Derecho, no sólo para las instituciones que estén pasando por una corrupción, sino también para todo el Estado, ya que no puede existir una legitimidad parcial o una deslegitimación parcial, puesto que estas, generalmente constituyen a las consecuencias del mantenimiento y permanecía de la pobreza, depredación de recursos públicos y primacía de los intereses particulares, convirtiéndose el estado, donde exista esta barbaridad, en una dictadura democrática, toda vez que no avanzan los fines del estado en ningún ámbito, quedándose las leyes en solo palabras que se las lleva el viento y papeles escritos de tinta. En la película “la dictadura perfecta”, podemos evidenciar como los estados, que tiene un desarrollo normativo demócrata, se pueden convertir en una dictadura parcial, respetándose los fines del estado y los derechos de las personas, de una manera parcial. Quienes integren en virtud de un proceso democrático los órganos del Estado, deben orientar su labor y su actividad administrativa hacia el cumplimiento de los fines esenciales definidos por la teleología constitucional, lo que implica una relación inescindible entre la función administrativa y los postulados del Estado Social de Derecho. Con base en la lectura, podemos definir la legitimidad como: el reconocimiento por parte de la población de que los gobernantes de su Estado son los verdaderos titulares del poder y los que tienen derecho a ejercerlo: a crear y aplicar normas jurídicas, disponiendo del monopolio de la fuerza, de acuerdo con esas normas, sobre la población. No tenemos la posibilidad de dialogar de legitimidad sin dialogar de poder, ni se pude dialogar de poder sin dialogar de la tan
asimetría entre poder y responsabilidad (para algunos grupos o individuos el poder aumenta sin que esto comporte una mayor responsabilidad), mientras que a nivel social y económico, a la imposibilidad ‘legal’ de hacer respetar los contratos de intercambio sobreviene la violencia como elemento de sanción”. El término corrupción resulta polisémico y multivocista y se puede ver a partir de la ética, la política, la economía o el derecho. La corrupción está asociada con los métodos administrativos, ya que aquel es el escenario propicio para la ejecución de las prácticas orientadas hacia la satisfacción de los intereses particulares de quienes fomentan o financian estas prácticas, por medio de la asignación de comisiones o de sobornos. Vale la pena insistir mencionando que el inicio de Estado social de derecho contrasta con el Estado de derecho liberal referente a sus objetivos: el Estado social de derecho por el momento no se limita únicamente a afirmar la vida, la propiedad y la independencia por medio de la custodia contra el fraude, el robo, el incumplimiento contractual o los males ocasionados por terceros, funcionalidades típicas del Estado gendarme. Para eso, el Estado cuenta con facultades amplias de participación en la economía, las cuales han de estar orientadas a conseguir los objetivos en general del Estado y los objetivos especiales de la participación económica enunciados primordialmente en el artículo 334 de la Constitución. Se han definido dos tipos de legitimidad que se pueden dar, la primera de ellas es la legitimidad del orden público (legitimidad formal), y la segunda es la que se usa en el ejercicio del poder político (legitimidad formal). Habermas dividió la primera de esta manera:
atención de los espectadores hacia temas escandalosos y sensacionalistas a fin de cubrir aquellos que ponen en riesgo la reputación de funcionarios públicos o de la propio Estado. Concluyendo, que este tipo de legitimidad descrito por Habermas se basa en la justificación del estado mismo, de su existencia y de la necesidad de un orden jurídico-político derivado del contrato social sobre el que se estructura el Estado moderno. Por otro lado, tenemos la legitimidad en el ejercicio del poder político, la cual debe mirar con la óptica del modelo de Estado definido por la Constitución Política. Este tipo de legitimidad implica el cumplimiento de los fines definidos por el propio estado como condicionantes de su accionar. En el caso colombiano el modelo constitucional de estado social de derecho conlleva a que la legitimidad en el ejercicio del poder político impliqué que todo el accionar del aparato Estatal debe orientar su sentido hacia la satisfacción de los fines esenciales del estado consagrados en la Constitución de 1991, artículo 2. De los anteriores dos tipos de legitimidad se deriva la ilegitimidad material y la formal. La primera de ellas se refiere al hecho de que las estructuras edifican el estado no está cumpliendo con los cometidos definidos por dogmática. Constitucional. Por distintos factores como lo son: la anteposición de intereses privados en la configuración de normas y políticas públicas, elección de representantes que provienen de grupos ilegales con función administrativa y configuración del sistema democrático a partir de relaciones clientelares. En segundo lugar, tenemos la ilegitimidad material en el Estado Social de Derecho implica que si un representante fue elegido democráticamente, pero sus acciones se encuentran orientadas en un sentido diferente al cumplimiento de los fines del Estado, atendiendo a intereses particulares discordantes del interés público, ese ejercicio del poder político carecerá de legitimidad en el sentido material aun cuando en apariencia esté revestido de legitimidad formal. De acuerdo a estas dos ilegitimidades podemos concluir que según la película “la dictadura perfecta”, Carmelo Vargas incurrió en estas dos, dado que para llegar al cargo de presidente su elección provino de acciones ilegales, clientelismo y corrupción. Así mismo, sus intereses eran netamente particulares contrarios a los fines e intereses públicos consagrados en la constitución mexicana.
manera persona siento que es lo que sucede en nuestra amada Colombia, y más allá de una crítica, se convierte en una enseñanza, que podemos difundir, para que todas la personas víctimas, nos unamos en contra de ilegitimidad material del poder político, comprendiendo que cuando en un estado, existe este patrón, se evidencia que el estado te solo te deja ver, lo que él quiere que vea, y escuches lo él quiere que escuches y la persona que va en contra del pensamiento tradicional es quitado del camino. Podemos romper esto, instruyéndonos académicamente, uniéndonos como pueblo, donde prevalezca más nuestras instituciones jurídicas, que los beneficios particulares.