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Análisis de escisión de una porcion de musculo
Tipo: Apuntes
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ANATOMÍA APLICADA DE LOS PEQUEÑOS ANIMALES Prof. José Luis Morales López
*Foto: Manuel (izquierda) y José Manuel (derecha).
**1. INTRODUCCIÓN.................................................................................Pag. 3
Regiones mandibular e intermandibular:
Glándula sublingual: Esta glándula presenta 2 porciones:
Debido a traumatismos en la cavidad o su conducto (obstrucciones) pueden sufrir daños que den lugar a mucocele salivar. En este caso, la saliva se acumula en el tejido subcutáneo de la región intermandibular o porciones craneales del cuello; También es frecuente sobre todo en caso de obstrucción rostral del conducto, acúmulo de saliva en el mismo y los tejidos sublinguales (ránula), provocando desplazamiento lateral de la lengua. La acumulación de la saliva en las paredes de la faringe requiere la intervención urgente ante el peligro de asfixia. El diagnóstico se asegura mediante sialografía: se canaliza el conducto, se introduce un medio de contraste y se observa en las imágenes radiográficas el derrame del líquido.
Las glándulas salivales mandibular y sublingual se extraen juntas porque la segunda guarda relaciones íntimas con el conducto de la mandibular. La remoción de una traumatizaría a la otra glándula. La extracción de las glándulas sobre el lado afectado es todo lo necesario para la resolución del mucocele, sin embargo, ambos pares de glándulas mandibulares y sublinguales pueden resecarse sin riesgo de xerostomía. Si persisten las dudas sobre el lado de origen del mucocele, efectuar una incisopunción sobre la tumefacción y palpar digitalmente el lumen. El lado sano es redondeado y liso. El lado afectado tiene un tracto o túnel hacia el sitio del derrame. Colocar al paciente en decúbito lateral. Debajo de su cuello colocar un cojín para rotar la zona ventral dorsalmente y fijarlo en posición extendida. Localizar la glándula salival mandibular entre las venas linguofacial y maxilar donde se unen a la vena yugular externa. Incidir la piel, tejido subcutáneo y músculo cutáneo del cuello desde el ángulo de la mandíbula caudalmente hasta la vena yugular externa, para exponer la cápsula fibrosa de la glándula mandibular. Evitar la rama de 2º nervio cervical que atraviesa la cápsula, incidirla y disecarla de las glándulas.
Ligar la arteria (rama de la arteria auricular grande) y vena donde se encuentran sobre la zona dorsomedial de la glándula. Continuar disecando hacia craneal siendo el conducto mandibular, conducto sublingual y glándulas sublinguales polistomáticas hacia la boca. Incidir la fascia entre los músculos masetero y digástrico. Exponer todo el complejo salival mandibular y sublingual mediante la retracción del músculo digástrico y aplicación de tracción caudal sobre la glándula mandibular. Si resulta necesario, realizar la miotomía o tunelizar el complejo ductal glandular sublingual caudal bajo el músculo digástrico para mejorar la visualización. Disecar (forma roma y aguda) rostralmente hasta identificar la rama lingual del nervio trigémino y dejando solo los conductos en el complejo. Evitar el traumatismo de los nervios lingual o hipogloso. Tratar de identificar el defecto glándula/conducto que ocasiona el mucocele, porque en el caso opuesto la lesión se origina a partir del complejo glándula/conducto contralateral. Ligar y transectar el complejo glándula/conducto sublingual mandibular casi en caudal al nervio lingual. La atracción sobre el complejo puede inducir desgarro ductal. Si se produce cerca del punto de transección deseado o sobre la zona bucal del defecto glándula/conducto no se requiere disección adicional. No obstante, si el desgarro se produce antes del defecto glándula/conducto o cuando este no se identifica y el tejido glandular se encuentra en oral del desgarro se recomienda la resección adicional del tejido glandular para prevenir la recurrencia. Lavar el campo operatorio antes de proceder a la síntesis. Afrontar el músculo digástrico si ha sido incidido con puntos en “X” o en “U” horizontal. Cerrar el espacio muerto con unos cuantos puntos en la cápsula y tejidos profundos. Hacer la aposición rutinaria de los músculos superficiales, subcutáneo y tegumento.
Diferencias de nuestro procedimiento con el descrito anteriormente:
! Hicimos una incisión horizontal entre las venas maxilar y linguofacial, seccionando piel y subcutáneo (Fig. 1).
! Luego nos encontramos con el músculo platisma, que también seccionamos (Fig. 2).
! Tras hacer esto visualizamos perfectamente la glándula mandibular entre las venas linguofacial y maxilar (Fig.3).
! Seccionamos la cápsula de las glándulas salivales mandibular y sublingual monostomática (Fig. 4 - Fig. 5).
técnica original para la resección descrita por Lacroix establecía un “escurridero” y se conoce como procedimiento de Zepp.
Procedimiento:
Rasurar todo el lado de la cara y ambos lados del pabellón auricular. Irrigar con suavidad el oído y eliminar todos los detritos que sea posible. Colocar al paciente en decúbito lateral, con la cabeza apoyada sobre una toalla y preparar el pabellón auricular y la piel circundante para la cirugía aséptica. Colocar los paños de campo alrededor de la oreja con todo en pabellón incluido dentro del campo operatorio. Tomando la zona ventral de la cabeza del animal, se coloca una pinza dentro del canal auditivo del animal para determinar su extensión ventral. Marcar un sitio por debajo del canal auditivo horizontal, que es la mitad del largo del canal auricular vertical. Efectuar 2 incisiones paralelas a la piel lateral de canal vertical que se extienden desde el trago ventralmente hasta el sitio marcado. Estas incisiones deben tener una vez y media el largo del canal auditivo vertical. Conectar las incisiones ventralmente y con una combinación de disección aguda y roma, reflejar el colgajo de piel hacia dorsal exponiendo la pared cartilaginosa lateral del canal auricular vertical. Durante la disección manténgase lo mas cercano posible al cartílago del canal auditivo para evitar el daño inadvertido del nervio facial. Observar la glándula parótida en la extensión ventral de la incisión y evitar su lesión. Mientras se sostiene la zona dorsal de la cabeza del animal, emplear la tijera de Mayo para cortar el canal vertical. Colocar una hoja de la tijera dentro del canal en la incisura pretrágica del meato acústico externo e incidir el canal ventralmente hasta el nivel del canal horizontal. Repetir el proceso comenzando en la incisura intertrágica. Angular la tijera unos 30 º mientras se realizan los cortes. No permitir que la incisión hacia la zona lateral del canal o el escurridero será demasiado estrecho. Extender las incisiones ventralmente hasta el comienzo del canal horizontal o el escurridero no quedará plano contra la piel. Reflejar el colgajo cartilaginoso distalmente, inspeccionar la apertura del canal horizontal, y si está indicado, obtener especimenes para cultivo. En ocasiones, la apertura puede ser ensanchada haciendo 2 cortes pequeños en la zona craneal y caudal. Resecar la mitad distal del colgajo de cartílago para confeccionar el escurridero y extraer el colgajo cutáneo. El ligamento entre los colgajos vertical y horizontal por lo usual actúa como una bisagra posibilitando que el escurridero quede plano, pero en algunos casos esto se facilitará haciendo muescas del cartílago sobre la zona ventral del escurridero. Colocar suturas de monofilamentos absorbibles o no absorbibles desde los tejidos epiteliales hasta la piel. Comenzar a suturar en la apertura del canal horizontal, luego continuar con
el escurridero. Por último, suturar las zonas craneal y caudal de la pared medial del canal auditivo vertical a la piel.
*NOTA: En esta intervención hay que tener presente que las partes dorsales de la glándula parótida se interponen en la zona de escisión. La prácticamente sección de la vena auricular rostral o/y la vena temporal superficial hace prever abundante hemorragia.
Diferencias de nuestro procedimiento con el descrito anteriormente:
! Metemos una pinza por el canal vertical del meato acústico externo para ver donde terminaba éste (Fig.1).
! Incidimos piel y subcutáneo y observamos la vena auricular rostral (rama de la v. Temporal superficial) y la porción ventral del músculo cigomáticoauricular (Fig. 2).
! Incidimos la pared lateral del canal vertical del meato acústico externo con un bisturí (Fig. 3), respetando el músculo cigomáticoauricular (porque pensamos que para conseguir la finalidad de esta intervención no hacía falta seccionar este músculo, y por ello preferimos preservarlo), y continuamos la sección de la pared lateral (desde la parte ventral del m. cigomáticoauricular hasta el lugar que comunican el canal vertical y horizontal del meato acústico externo) con tijeras de punta roma (Fig. 4 - Fig. 5 – Fig. 6).
! Intentamos suturar piel y subcutáneo al cartílago sin traspasarlo totalmente, pero era muy fino y se desgarraba. Así que optamos por traspasar el cartílago totalmente en toda la sutura (con sutura no absorbible y puntos simples discontinuos), excepto en la porción mas ventral d la incisión, en la que solo afrontamos los bordes de la incisión puesto que en esta parte no había cartílago (Fig. 7 – Fig. 8 – Fig.9).
La ventriculocordectomía es la remonción de las cuerdas vocales para modificar la vocalización, extraer masas o agrandar la glotis ventral. El procedimiento se puede realizar utilizando un acceso oral o ventral (laringotomía).
***** La ventriculocordectomía realizada para ensanchar la glotis ventral requiere una mayor resección de pliegue vocal que para la desvocalización.
La endoscopia vía bucal permite visualizar los pliegues vocales. Estos limitan la rima de la glotis con forma de “V”. La base anatómica de los pliegues es el ligamento (elástico) y el músculo vocal.
La rima de la glotis es el espacio mas estrecho de la cavidad laríngea; Los pliegues vocales actúan como una válvula que puede cerrar completamente la rima de la glotis, o entrada del aire. Esto implica que las inflamaciones o las irritaciones que provoquen tumefacción de los pliegues, reduzcan el espacio de la rima de la glotis con el subsiguiente peligro de asfixia.
Los pliegues vocales junto con otras estructuras de la laringe (pliegues vestibulares, ventrículos) son la principal fuente de emisión de sonido (fonación).
Procedimiento para el acceso ventral (laringotomía):
Colocar al paciente en decúbito dorsal con el cuello extendido. Exponer la laringe empleando un acceso por la línea media cervical ventral comenzando en rostral del hueso basihioides con extensión hacia caudal hacia la tráquea proximal. Separar y retraer los músculos esternohioideos pares. Identificar la línea media del cartílago tiroides. Ligar y dividir la vena laríngea impar si es necesario. Incidir la membrana cricotiroidea. Extender la incisión a lo largo de la línea media del cartílago tiroides lo que sea necesario para exponer los pliegues vocales. Escindir todo el pliegue vocal desde el cartílago aritenoides en dorsal y el cartílago tiroides en ventral. Cerrar el defecto afrontando la mucosa con un patrón de sutura aposicional contínua simple. Afrontar la membrana cricotiroidea y cartílago tiroides con suturas interrumpidas simples. Afrontar los músculos esternohioideos con un patrón contínuo simple. Cerrar los tejidos subcutáneos y la piel en la forma rutinaria.
La vasectomía inhibe la fertilidad masculina mientras mantiene los patrones conductuales del macho. Los andrógenos continúan elaborándose porque las células de Leydig no se alteran de modo significativo. La técnica rara vez se recomienda porque el vagabundeo, agresividad y marcación urinaria persiste, mientras que no ocurre una reducción de las enfermedades con mediación hormonal. Los espermatozoides persisten en el eyaculado canino durante tres semanas, y en el felino, durante siete semanas después de la vasectomía. En los perro, el tiempo hasta la azoospermia se acorta irrigando el conducto deferente en el momento de la vasectomía. Los machos vasectomizados deben ser evaluados después del procedimiento para documentar eyaculados azoospérmicos antes de contactar con hembras enteras. Esta técnica debería desalentarse como método para el control poblacional.
Procedimiento: Efectuar una incisión de 1-2 cm sobre el cordón espermático entre el escroto y el anillo inguinal. Localizar el cordón espermático, incidir la túnica vaginal y aislar el conducto deferente mediante disección roma. Hacer doble ligadura del conducto deferente y resecar una sección de 0’5 cm del mismo entre las ligaduras. Repetir el procedimiento sobre el cordón espermático contralateral. Afrontar los tejidos subcutáneos y el tegumento.
Diferencias de nuestro procedimiento con el anterior:
! Incisión de la piel y subcutáneo (Fig. 1).
! Observamos la túnica vaginal, por transparencia diferenciamos el conducto deferente y los vasos testiculares y el músculo cremaster (Fig. 2 – Fig.3).
! Incidimos la túnica vaginal (Fig. 4) y aislamos el conducto deferente (Fig. 5 – Fig. 6).
! Resecamos una porción de conducto deferente (Fig. 7) y ligamos los dos extremos del conducto (Fig. 8).
! Suturamos piel y subcutáneo con puntos simples discontinuos (Fig. 9).