Docsity
Docsity

Prepara tus exámenes
Prepara tus exámenes

Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity


Consigue puntos base para descargar
Consigue puntos base para descargar

Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium


Orientación Universidad
Orientación Universidad

Resumen - Michael Mann - La Crisis del Estado Nación en América Latina, Resúmenes de Ciencia Política

Resumen hecho en base al texto de Michael Mann. Se trata PODER DESPÓTICO e INFRAESTRUCTURAL, construcción de Estados, etc.

Tipo: Resúmenes

2018/2019

Subido el 22/09/2019

usuario desconocido
usuario desconocido 🇦🇷

2 documentos

1 / 4

Toggle sidebar

Esta página no es visible en la vista previa

¡No te pierdas las partes importantes!

bg1
RESUMEN
Michael Mann
La crisis del Estado-nación en América Latina
Abstract
El artículo parte del supuesto de que los estados modernos más efectivos son aquellos que
han emergido en sociedades sucientemente homogéneas e igualitarias, y por lo tanto en
condiciones de hacer crecer un sentimiento compartido de ciudadanía. Esto permite a los
estados generar efectivos poderes infraestructurales para movilizar recursos y así promover
el desarrollo. Los estados-nación de América Latina presentan muchas deciencias a este
respecto; y dichas deciencias constituyen la "crisis estructural" de los estados nación en la
región. Adicionalmente, se ha asistido al despliegue de dos más recientes "crisis
situacionales", la deuda externa y las drogas, las cuales han exacerbado la crisis estructural
de más largo plazo.
Mann concibe un doble signicado del poder estatal:
-PODER DESPÓTICO: Es la capacidad de las elites estatales para tomar decisiones
sin negociaciones regulares con sectores y grupos de la sociedad civil. En principio,
la democracia no implica poder despótico alguno, aunque todos los estados-nación
en realidad lo ejercen de alguna medida.
Es el Estado ejerciendo un poder SOBRE su sociedad.
-PODER INFRAESTRUCTURAL: Es la capacidad del Estado para implementar
realmente decisiones a lo largo de su territorio, independientemente de quien tome
esas decisiones. Puede denominársele también, capacidad o eciencia del Estado.
Para ello, se requiere que este posea infraestructuras que penetren de forma
generalizada en la sociedad civil, que sirvan como medio para que las elites
extraigan recursos de, y suministren recursos a, todos los súbditos.
Es el Estado implementando de forma efectiva decisiones A TRAVÉS DE su
sociedad.
Así, podemos identicar diferentes formas de Estados de acuerdo a cuan altos o bajos sean
sus niveles de poder infraestructural o despótico:
El Estado moderno ideal combina un alto poder infraestructural y un bajo poder
despótico (Estado burocrático), esto es, cuenta con la capacidad de movilizar recursos y
reglas de forma efectiva en todo su territorio, al tiempo que sigue siendo democrático.
Estos serían los Estados-nacn plenamente democráticos y burocráticos. Y así son los
Estados avanzados del hemisferio norte.
Pero no todo fue fácil. El proceso de establecer Estados-nación infraestructuralmente
poderosos y ampliamente democráticos en Occidente (para Mann, América Latina no es
Occidente) fue largo y tortuoso. Supuso tres grandes procesos sociales, que permitieron el
surgimiento de sociedades civiles relativamente centralizadas, homogéneas e igualitarias,
articuladas políticamente por un sentimiento compartido de ciudadanía nacional:
1. REDUCCIÓN DE LA HETEROGENEIDAD ÉTNICA EN LOS ESTADOS
Originalmente, todos los Estados de Occidente eran sumamente multiétnicos. Pero
esta variedad se redujo a lo largo de muchos siglos, de muchas formas:
Masivas limpiezas étnicas (como en Estados Unidos)
Asimilación parte voluntaria parte forzada de una identidad étnica dominante
(Francia, Alemania, etc.). Negri dice que España es Castilla, Italia es Piamonte,
el Reino Unido es Inglaterra, Alemania es Prusia, etc. Es una identidad que
pf3
pf4

Vista previa parcial del texto

¡Descarga Resumen - Michael Mann - La Crisis del Estado Nación en América Latina y más Resúmenes en PDF de Ciencia Política solo en Docsity!

RESUMEN

Michael Mann La crisis del Estado-nación en América Latina

Abstract El artículo parte del supuesto de que los estados modernos más efectivos son aquellos que han emergido en sociedades suficientemente homogéneas e igualitarias, y por lo tanto en condiciones de hacer crecer un sentimiento compartido de ciudadanía. Esto permite a los estados generar efectivos poderes infraestructurales para movilizar recursos y así promover el desarrollo. Los estados-nación de América Latina presentan muchas deficiencias a este respecto; y dichas deficiencias constituyen la "crisis estructural" de los estados nación en la región. Adicionalmente, se ha asistido al despliegue de dos más recientes "crisis situacionales", la deuda externa y las drogas, las cuales han exacerbado la crisis estructural de más largo plazo.

Mann concibe un doble significado del poder estatal:

- PODER DESPÓTICO: Es la capacidad de las elites estatales para tomar decisiones

sin negociaciones regulares con sectores y grupos de la sociedad civil. En principio, la democracia no implica poder despótico alguno, aunque todos los estados-nación en realidad lo ejercen de alguna medida. Es el Estado ejerciendo un poder SOBRE su sociedad.

- PODER INFRAESTRUCTURAL: Es la capacidad del Estado para implementar

realmente decisiones a lo largo de su territorio, independientemente de quien tome esas decisiones. Puede denominársele también, capacidad o eficiencia del Estado. Para ello, se requiere que este posea infraestructuras que penetren de forma generalizada en la sociedad civil, que sirvan como medio para que las elites extraigan recursos de, y suministren recursos a, todos los súbditos. Es el Estado implementando de forma efectiva decisiones A TRAVÉS DE su sociedad.

Así, podemos identificar diferentes formas de Estados de acuerdo a cuan altos o bajos sean sus niveles de poder infraestructural o despótico:

El Estado moderno ideal combina un alto poder infraestructural y un bajo poder despótico (Estado burocrático), esto es, cuenta con la capacidad de movilizar recursos y reglas de forma efectiva en todo su territorio, al tiempo que sigue siendo democrático. Estos serían los Estados-nación plenamente democráticos y burocráticos. Y así son los Estados avanzados del hemisferio norte. Pero no todo fue fácil. El proceso de establecer Estados-nación infraestructuralmente poderosos y ampliamente democráticos en Occidente (para Mann, América Latina no es Occidente) fue largo y tortuoso. Supuso tres grandes procesos sociales, que permitieron el surgimiento de sociedades civiles relativamente centralizadas, homogéneas e igualitarias, articuladas políticamente por un sentimiento compartido de ciudadanía nacional:

1. REDUCCIÓN DE LA HETEROGENEIDAD ÉTNICA EN LOS ESTADOS

Originalmente, todos los Estados de Occidente eran sumamente multiétnicos. Pero esta variedad se redujo a lo largo de muchos siglos, de muchas formas:

• Masivas limpiezas étnicas (como en Estados Unidos)

• Asimilación parte voluntaria parte forzada de una identidad étnica dominante

(Francia, Alemania, etc.). Negri dice que España es Castilla, Italia es Piamonte, el Reino Unido es Inglaterra, Alemania es Prusia, etc. Es una identidad que

coopta a las demás, con mayor o menor éxito. Véase la obra de Eugen Weber de 1978 Peasants Into Frenchmen. Existen, y no hay porqué negarlo, algunas sociedades multiétnicas democráticas y desarrolladas, como Suiza o Bélgica, u otras con minorías autónomas como España y el Reino Unido, pero, en general, los Estados-nación lograron imponer un solo sentido común de nacionalidad. Es interesante observar como, muchas veces, fue por medio de la opresión y del asesinato que se desarrolló un sentido común de nacionalidad.

2. GUERRAS, TRIBUTACIÓN Y REPRESENTACIÓN

Los Estados occidentales se originaron como monarquías guerreras. Fueron frecuentes las guerras, y estas, a su vez, implicaron la necesidad de grandes recursos, económicos y humanos. Las primeras burcocracias estatales no son más que eso: la organización necesaria para sostener el esfuerzo de guerra. Y mantener todo esto implicaba más tributos cobrados a los contribuyentes. Y frente a la imposibilidad de frenar la guerra, porque hubiera supuesto el fin de muchos Estados, los contribuyentes obtuvieron REPRESENTACIÓN. Es la aplicación del lema americano “No taxation (or conscription) without representation”. Fue a través de este proceso por el cual muchos Estados llegaron a la democratización.

3. REDUCCIÓN DE LAS DESIGUALDADES

Esta lucha se vio reforzada por grandes reducciones en las desigualdades de clase en cada sociedad nacional, mediante la combinación de una industrialización más bien extensa y uniforme dentro de los territorios y de presiones democráticas sobre los Estados en busca de una tributación más justa. Estos procesos fueron acompañados por el respaldo en la sociedad civil gracias a la institucionalización del conflicto de clase producida a lo largo de 100 años.

Pero todo este proceso fue único. Es decir, fue un proceso endógeno, creado dentro de Europa (Occidente), para Europa y que surgió naturalmente. Fue una historia única, que se no se ha repetido, ni se repetirá, en otras regiones del mundo. Tampoco sería deseable que así fuera, ya que implicó grandes guerras. Los Estados latinoamericanos, por el contrario, se desarrollaron y se desarrollarán a su propio ritmo. Y, aunque sus condiciones de surgimiento podrían ser similares a las de otros Estados como Australia o EE. UU., los Estados de Latinoamérica tuvieron dos rasgos distintivos que retrasaron la emergencia de verdaderos Estados-nación (Esto es lo más importante del texto, lo que Negri explicó en clase):

1. PRESIONES MILITARES-FISCALES MUCHO MÁS DÉBILES

Las guerras fueron más escasas y menores en América Latina y, por lo tanto, los Estados y sus aparatos militares eran más pequeños. Mientras que las elites europeas guerreaban, las elites latinoamericanas se preocupaban más por lograr insertarse al comercio internacional, por lo que los recursos del Estado se enfocaban mucho más en la construcción de infraestructura para el comercio que para la mejora del ejército. No había que mantener unido el país, porque no había amenaza de invasión, no había amenaza de que si no controlabas tu territorio de lo podían sacar otros Estados. En cambio, había necesidad imperante de explotar los recursos y de llevarlos a los puertos para el comercio. Esto provocaba que las necesidades tributarias de los Estados fueran bajas, y cuando surgían eran solucionadas con deuda. Las elites terratenientes controlaban el poder, pagaban pocos impuestos y daban poca oportunidad al desarrollo de una sociedad más igualitaria.

2. CONTRASTES ÉTNICOS MUY FUERTES

A modo de conclusión, se puede decir que:

- América Latina no tiene problemas en la dimensión despótica del poder: son casi

todas democracias representativas asentadas

- Hay, sin embargo, una honda crisis estructural del Estado-nación, tanto en la

NACIÓN como en el PODER INFRAESTRUCTURAL.

- Las infraestructuras más debilitadas son las de policía y justicia por la violencia.

- En consecuencia, el reto principal para los Estados de América Latina no ha

cambiado desde sus respectivas independencias: como incorporar sus diversas poblaciones en una genuina ciudadanía nacional, que pueda sostener estados infraestructuralmente poderosos que, a su vez, se vuelvan plenamente democráticos.